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Mi banda sonora

mi banda sonora

Una tarea que dejaba siempre pendiente, de esas que debía hacer tarde o temprano pero simplemente me daba flojera empezar, era la de modificar el diseño de nuestro canal en YouTube, creado años atrás pero dejado al abandono. El tiempo que me tomé en convertirlo en un sitio decente me llevó también a pasar más rato viendo toda clase de videos. Es increíble cómo puedes de pronto descubrirte a ti mismo atrapado en ese remolino virtual llamado Videos Sugeridos.


YouTube es más que un repositorio gigante de contenido audiovisual, es un conglomerado de comunidades que interactúan, comparten y muchas veces –tan humanamente- pelean. La idea de compartir, sin embargo, prevalece y es emocionante encontrar disponible prácticamente cualquier canción, sin importar la época ni el idioma. Incluso algunos se dan el trabajo de insertar imágenes alusivas y letra completa para los amantes del karaoke. Terminado el video ocurre la magia -o maldición- de las sugerencias que nos van seduciendo hasta meternos en una espiral infinita. Como esa inocente canción de los 90's que andábamos buscando y nos lleva después a otra que no escuchábamos hace años, haciendo que sonriamos al saber que estamos viajando (in)voluntariamente, en una suerte de túnel del tiempo, entre nuestros recuerdos mejor guardados. El cautivador proceso se repetirá tantas veces como nosotros queramos.

No me fastidian las sugerencias de YouTube porque hasta ahora me han dado más satisfacciones que sinsabores. De hecho hace un tiempo se me dio por publicar en Twitter mis descubrimientos musicales cotidianos bajo el hashtag #canciondeldia, hallazgos en su mayoría gracias a las recomendaciones del sistema. No tardó en llegar el comentario aguafiestas argumentando que no todos tenemos los mismos gustos. Felizmente es así, digo yo, sino imagínense el aburrimiento de querer lo mismo. Esa vez no respondí al mensaje para no entrar en discusiones banales pero confieso que me detengo a leer los comentarios que la gente deja bajo un video musical. Es interesante ver que algunos son fuertes confesiones de amor, cobijadas bajo la manta de anonimato que aún otorga Internet.


Estoy convencido de que la experiencia de las recomendaciones se repetirá cada vez que busque una canción, probablemente porque en el fondo así quiero que sea. La música siempre ha sido parte de nuestras vidas y creo que al igual que una imagen, una canción vale más que mil palabras. Del mismo modo como una melodía puede cambiar de un momento a otro nuestro estado de ánimo ¿No sientes algunos días que tienes el humor sólo para cierto tipo de canciones?


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