
Conserva mi fotografía
y el cristal que nos separa
no me guardes como al libro
cuyas hojas desgastadas
se congelan en su tiempo
resignadas al olvido
Y si algún día me guardas
que sea cariño
por lo que una vez tuvimos
resérvame un espacio
junto a tus latidos
Ha pasado el tiempo
aumentó nuestra distancia
las miradas son distintas
la respiración más baja
y los labios tan ajenos
Pero estás en mis versos
retratada para siempre
enmarcada con mis manos
apreciada aquí en mi pecho
Conserva mi fotografía
y el cristal que nos separa
no podremos ser ajenos
porque el hombre que ahí posa
te amó como a su vida
Eduardo